En 1948 el libro “Comportamiento sexual humano”, del entomólogo Alfred Kinsey, revolucionó el mundo. Él mismo “modificó la forma de entender la sexualidad hasta el día de hoy”, leyendo la sinopsis de la obra adaptada por Marcelo Cosentino.
Alfred Kinsey es un prestigioso profesional que en pleno apogeo decide investigar el sexo en su totalidad. En el camino ignora todas las alarmas éticas y morales para lograr sus objetivos. Destruye familia, vida y todo lo que implica la investigación tan profunda. Gracias a todo este lío, el libro de Kinsey sirvió para regular la sexualidad hasta 1995.
“Principio de diversidad” Se basa en hechos reales y en quienes participaron en esa investigación. Sus rostros eran numerosos, que desde el principio mostraban lo confusos, atormentados, emocionados y feroces que estaban. Poco a poco, la obra da paso a historias que se desmoronan y se entrelazan a lo largo del espectáculo.
Los sin censura con los que lidiar son infinitos: homosexualidad, acoso, pedofilia y racismo, solo algunos de ellos. Además, muestra el papel de las mujeres que en su mayoría no completan los estudios básicos y se ven obligadas a depender completamente de sus maridos machistas, soportando así la humillación y la violencia doméstica y sexual.
La religión también juega un papel muy importante, donde generó un debate sobre el mandato aún vigente. El prejuicio y la negación absoluta de diversas prácticas y desviaciones no hacen más que exacerbar el hecho de que es mejor difundir lo que nadie se atreve a decir: exonerar o condenar.
Los 14 actores en escena lograron transmitir y retratar una historia que era muy difícil de llevar al final del guión. Con profesionalidad, conquista a un público asustado por la información que se brinda y que mucha gente ni siquiera conoce. El vestuario, por su parte, encaja perfectamente en el estilo de cada personaje. Hacia el final el aplauso fue real y valió la pena apostar por este tipo de propuestas en el teatro.
“Principio de diversidad” Tiene función, por ahora, todos los viernes hasta finales de agosto en el Teatro Multiescena a las 22 h. El precio es muy asequible: 600 pesos. Las entradas se pueden comprar en Platea.net.
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