El presidente húngaro aseguró que no querían ser mestizos, acusados de “mezcla de razas” en Europa y aseguró que debido a la gran cantidad de inmigrantes, fenómeno que achacó a la “izquierda internacionalista”, los países de Europa Occidental ” ya no son naciones”.
El primer ministro ultraconservador Viktor Orbán asegura que no se mezclarán "con otras razas"